#SomosBlanquinegros

Esperado derby, ilusión renacida tras la anterior jornada...y enorme decepción otra vez. Nuevamente desconexión en defensa con el partido al principio, y primer gol en contra a los cinco minutos. Control del juego, dominio, alguna ocasión, buen juego y, en el primer corner en contra, nos comemos un gol olímpico ( fallo de Caro, que esta temporada lleva teniendo varias cantadas ). Total, sin merecerlo, nos vamos con un 2-0 en contra al descanso. Volvemos, continuando con el buen juego de la primera mitad, y en una triple ocasión, la finaliza Edu Espiau, sólo, con toda la portería vacía, y remata al poste... Lamentable. Y ahí se fue acabando el partido, y más con el tercero, aprovechando otra endeblez defensiva blanquinegra. Pudo caer alguno más y nuestro equipo se había ido del partido hacía ya tiempo.
Así que nos volvemos, otra vez, con la decepción de otro partido regalado fuera de casa, y el añadido de haber sido superados por el Valladolid, con claridad aunque sin tanto merecimiento por el juego ofrecido.
De momento, nos salvan nuestros resultados en El Plantío. Como se empiecen a escapar puntos en casa, y no demos con la solución a domicilio, podemos empezar a tener problemas.

Me has comido lo pensado del partido. Tuvimos buenos momentos, pero tremendos errores defensivos nos castigan de forma absurda. El primero, con los defensas tan arriba y ese pasillo tremendo, Caro debe estar fuera del área. El segundo no debe ser gol jamás, un balón que ves venir por alto desde más de treinta metros, ni rompetechos se la come, a pesar de la comentarista que lo califica como golazo. Y el tercero un balón raso que se pasea por medio del área sin nadie que se cruce. Y si esto fuera poco, el tremendo fallo de Espiau que nos metía en el partido y que hasta ese momento el Valladolid no había demostrado nada. A ganar mañana al Leganés, que bastante se rió de nosotros la temporada pasada. Aupa Burgos